viernes, 15 de abril de 2022

Santa María de Gósol

Santa María de Gósol (Berguedà, Provincia de BarcelonaEste edificio que ya sale mencionado en el acta de consagración del obispado de Urgell en el siglo IX - pero ésta acta no se tiene por auténtica - incorpora una serie de interrogantes que hacen complicado llegar a entender cómo se pasó de un edificio prerrománico a las ruinas que podemos ver hoy día.

La orientación puede ser clave para intentar entenderlo:
• Ábside orientado a Noroeste
• Fachada principal orientada a Sudeste.

Vamos a especular:
• Imaginemos que el actual ábside esté construido en realidad sobre el muro Norte de la iglesia prerrománica.
• Que la actual torre, fuera en realidad el antiguo ábside prerrománico.
• Si observamos el siguiente plano de planta no lo encontraremos tan incoherente, hay muchas iglesias prerrománicas con el ábside alabeado como lo tendría ésta y la orientación sería bastante correcta.
Ésta es una vía que no he encontrado explorada hasta ahora y la dejo abierta, pero nos permite seguir especulando y poniendo orden en el crecimiento del edificio.
Si la teoría propuesta fuese correcta, el edificio no podía crecer al ritmo de la población puesto que no tenía más montaña. Girar la orientación de la iglesia y convertir una nave lateral en ábside no es demasiado convencional pero encontramos ejemplos a partir de la basílica de Majencio en que ya lo hicieron. El edificio resultante sería atípico, hablaríamos de una gran nave casi cuadrada, pero esto también lo encontramos en la Catedral de Girona.
De izquierda a derecha: Ábside, arco toral, bóveda y torre-campanario.

A partir de este punto todo encaja con lo que podemos ver:
• Una nave cuadrangular con un gran lienzo vertical por ábside como primera gran reforma a partir de la construcción de la iglesia prerrománica. Debemos saber ver el arco toral que hacía de marco en el ábside. El muro de cierre absidal sólo tiene que aguantar su propio peso en piedra, no recibe esfuerzos, puede ser delgado. (foto superior)
• Una nueva ampliación, comportó un sistema de bóveda diferente. Ya nos encontraríamos en un período gótico, pero construir una bóveda ojival comportaría un gran desajuste con la altura de la primera bóveda románica, mucho más baja. La solución utilizada de construir una bóveda por arista, es la más idónea en este caso ya que nos permite calcular la altura y ligarlo con la primera bóveda y los esfuerzos podemos descargarlos sin demasiado problema a través de las propias aristas.
• De esta etapa seguramente sería la pequeña capilla que hay junto al campanario y también cubierta con bóveda de arista y la capilla del lado opuesto al campanario que sólo conocemos su existencia y su advocación pero no su forma ni las dimensiones.
En el chaflán podemos apreciar el arranque de la bóveda por aristas hecha con una piedra más rojiza.

Obsérvese la siguiente secuencia para llegar a formar la bóveda por arista de la pequeña capilla a partir de una forma trapezoidal irregular, no hay ningún lado igual pero la altura debe mantenerse constante durante todo el proceso, me hubiera gustado ver la cara que pondrían los albañiles a la hora de construir las cimbras.
Nota: El proceso que se ha seguido aquí no tiene nada que ver con ninguna metodología medieval, sólo es indicativo para ver cómo llegamos al mismo final con herramientas modernas. La figura 5 nos enseña la forma que tendría la cimbra y la 7 una vez terminada la bóveda.

El campanario nos ofrece una serie de sorpresas curiosas, casi todos están de acuerdo en afirmar que es anterior a la actual iglesia. Hay mucha literatura explicando las singularidades de este campanario o torre, no lo repetiremos, pero es curiosa la ventana-festejador que encontramos; evidentemente no corresponde a ninguna función litúrgica, sino más bien a una función doméstica típica de un castillo o casa importante. A esta ventana le desmontaron el alféizar y desde éste punto podían salir sobre la bóveda por arista -que deberían reforzar- de la pequeña capilla que hay al lado. Por éste motivo tuvieron que elevar la cubierta para poder obtener un espacio útil más alto.

Ventana-festejador desde el interior de la torre.

La apertura que se ve en el centro de la imagen corresponde a la ventana-festejador vista desde el exterior, obsérvense los cortes inclinados en la torre para variar la altura del tejado de la pequeña capilla que había debajo.

Se hace difícil entender porque se dedicaron a tapiar ventanas y porque tenían que enlucir los muros con mortero a menos que lo adaptaran como viviendas.

Revoque interior y ventanas tapiadas.

Finalmente ésta torre o campanario nos ofrece una curiosa sorpresa que encuentro muy raro que ninguna persona que me ha precedido escribiendo sobre el templo no haya observado y si lo ha hecho lo desconozco. Todo el mundo nos dice que es cuadrangular y ligeramente piramidal, pero yo digo que una parte es cuadrangular pero el resto era octogonal y construido según cánones escolásticos góticos que nos hablan de la conexión de la tierra (cuadrado) con el cielo (redondo).
Obsérvese la parte superior de la siguiente fotografía como se ve perfectamente la octogonalidad de la torre en las dos aristas visibles. Es precisamente éste detalle tan interesante el que me cuesta entender que no lo haya encontrado publicado.
Los siguientes planos nos muestran la iglesia de Gósol tal y como la verían en los últimos años de esplendor, obsérvense en las diferentes vistas el final octogonal de la torre. Es evidente que no se puede determinar qué altura tendría ésta parte, aquí se ha terminado en la parte superior del ventanal. 
La misma tipología de torre la tenemos en la parte inferior del campanario de Santa María del Estany, pero no podemos olvidar que ésta iglesia la empezaron a restaurar en la segunda mitad del siglo XIX y a finales del siglo XX todavía trabajaban y el campanario no es precisamente románico.
Campanario de Santa M. del Estany. Obsérvese la transición del “cuadrado” al “redondo” en la parte baja y su continuación en planta cuadrangular en la parte superior.

No me gusta presentar dibujos que puedan ser complejos o difíciles de interpretar, pero hay veces que necesitas complicar la vida al lector para que se puedan hacer una mejor idea de lo que se pretende demostrar. La siguiente perspectiva nos muestra la complejidad del edificio y sus bóvedas. Se ha omitido la capilla que había en el lado opuesto a la torre.
El dibujo nos permite observar como la torre no es vertical, sino que se reduce en altura si lo comparamos con la verticalidad del muro absidal.

domingo, 2 de enero de 2022

San Juan de Torreblanca

La iglesia de San Juan Bautista de Torreblanca es un edificio de Ponts (comarca de la Noguera, Lleida) construido en el rasero de la montaña que le condicionó la construcción de la parte Norte del ábside, en ella podemos apreciar la característica tipología lombarda, el edificio se encuentra a poca distancia del castillo. Hay dos iglesias en Torreblanca dedicadas a San Juan aunque una lo está a san Juan Evangelista y la otra a san Juan Bautista. Esta concretamente está cerca de la protección del castillo y la segunda abajo en el llano, ambas abandonadas. Tenerlo presente con los navegadores.
La iglesia vista desde levante.
Es un edificio de una sola nave, cubierto con bóveda de cañón de perfil semicircular reforzada por cuatro arcos torales y cerrada a levante por un ábside semicircular con tres ventanas de doble derrame, aunque en el exterior sólo se ven dos, ya que la del lado Norte no llegó a abrirse debido a la montaña que hay al lado.
Cabecera y dos de las tres ventanas.
La bóveda colapsó por la parte de poniente y decidieron reducir las dimensiones de la iglesia casi a la mitad, la portalada original habría quedado intacta en la parte derruida y abrieron una nueva entrada más a levante con un par de jambas monolíticas y un simple dintel.
La nueva puerta de la iglesia.
La nave de poniente colapsada, a la derecha la puerta original, en frente se ve el cierre a nivel de arco toral. (No confundirlo con el arco toral que se ve en segundo plano)
Los arcos torales están soportados por columnas cilíndricas formadas con unos tambores que pasan de 1.5 metros de altura cada tramo. 
Hay de dos tipos:
  • Las columnas cilíndricas de los torales de la nave no tienen ningún tipo de baza (excavé un tambor para verificarlo, por debajo del pavimento el tambor ya se convierte en un prisma irregular roto a maceta) y son más altas que las presbiterales.
  • Las columnas absidales tienen una baza troncocónica y se adaptan a la escalonada del presbiterio y al diámetro absidal.
A la izquierda torales presbiterales con baza, a la derecha toral de la nave sin baza.
Todas estas columnas tienen unos capiteles esculpidos con figuras en bajorrelieve.
Capiteles absidales del lado Sur.

Capiteles absidales del lado Norte y la ventana tapiada.
Si observamos en medio de las columnas, apreciaremos que en el lado Norte es distinto. Comentábamos en una entrega sobre Sant Miquel de Grialó las semejanzas que había entre estos dos edificios y cómo en éste había una especie de sacristía ubicada entre columnas.
La foto de la maqueta nos permite ver dos interesantes detalles:
  • La sacristía entre columnas y el pequeño armario incrustado en la roca, este espacio está cubierto con bóveda de cañón.
  • La diferencia en la altura de los capiteles de los arcos torales de la nave en comparación con el sobre levantamiento del arco toral del lado del presbiterio para poder dejar ambos capiteles al nivel del arco presbiteral.
Varias vistas de la maqueta.



Hemos comentado que estos dos edificios también comparten la estructura de dos arcos presbiterales, o un arco toral junto al presbiteral, aunque el arco toral nace del mismo juego de capiteles que el presbiteral, esto obliga a sobrealzarlo considerablemente cuando lo comparamos con los demás arcos. Obsérvese con más detalle el plano inferior.

Vista superior: sección norte; vista inferior: sección Sur.

En los muros laterales se abren unos arcos formeros de diferente altura y luz, lo que hace que la separación de los arcos torales sea muy irregular. Se puede observar en la parte Norte al lado del ábside una especie de absidiola o pequeña capilla sufragada por algún personaje importante.


El edificio después de la reducción de la nave con la nueva puerta.

viernes, 8 de octubre de 2021

Mare de Deu del Remei d’Argentera

Es un edificio de Argentera, población del municipio de Vilanova de Meià comarca de la Noguera (Catalunya). Es una iglesia de una sola nave cubierta con bóveda de cañón apuntado, típico de finales de la etapa románica seguramente bien entrado el siglo XII. El edificio presenta tres etapas constructivas muy evidentes que han ido integrando como han podido a lo largo de los siglos. La parte conservada más antigua es la de poniente, el arco toral que aguanta la bóveda ya es de perfil apuntado y no tiene pilares o montantes, sino que nace directamente encima de una ménsula con perfil redondeado y casi de la misma anchura que el arco, aunque debajo de ésta, hay una especie de pilar que le hace de soporte con una segunda ménsula, todo ello no llega a 1.5 metro.
En el lado Sur y dentro del último tramo encontramos una puerta muy alargada y estrecha, de hecho es tan alta que le tuvieron que tapar un buen tramo cuando construyeron un coro en aquel lugar. Llaman la atención las imponentes jambas de los lados de la puerta.
Detalle de la puerta, las jambas y el trozo tapiado.
La bóveda de este último tramo y el siguiente está construida a sardinel sobre encañizado. A partir de éste punto alguna parte de la estructura debió colapsar; tuvieron que engrosar el muro Norte, casi doblándolo y por la parte Sur también reforzaron todo el sector de la puerta de acceso. El arco toral central está construido encima de un triple juego de ménsulas y no tiene continuación por la parte inferior como hemos visto en el primer toral. Entre éste segundo toral y el tercero ya encontramos una línea de impostas que nos marca la división entre el muro y la bóveda.
En esta fotografía podemos ver los puntos comentados. En primer término la imposta que va del segundo arco toral al tercero.
En este momento también tuvieron que sobre alzar el resto de muros de la nave que no habían engrosado previamente, posiblemente para reforzar los riñones de la bóveda ojival y mejorar la cubierta.

La fotografía nos permite ver el sobre alzado de la nave y la espadaña en el mismo estilo constructivo.
La bóveda a partir de este punto ya está construida con sillares muy bien labrados. El tercer arco toral, situado en el transepto de la nave, nace de pilares achaflanados, sufrió una grave alteración debido a un error de planteamiento del arco o de la bóveda, ya que tuvieron que rellenar con pedruscos y mortero un buen espesor del trasdós para llegar hasta la bóveda.
Obsérvese el relleno del arco toral hasta llegar a la bóveda (toral en segundo término)
La cabecera está formada por un ábside semicircular sin ningún tipo de decoración, tiene una única ventana que no se manifiesta en el interior del ábside y se aprecia perfectamente el sobre alzamiento a que le sometieron en la tercera fase. Este levantamiento del ábside lo deberían de hacer para que su cubierta no coincidiera en altura con la nueva cubierta de la sacristía como se puede apreciar en la siguiente fotografía.
Al aumentar el espesor del ábside por la parte interior para convertirlo en un ábside ojival, se perdieron las diferencias que suelen existir entre el diámetro absidal y el arco triunfal.
De ésta segunda etapa también es la espadaña de una altura descomunal que construyeron sobre el engrosado del sector Sur.
Esta fotografía del ábside es difícil de interpretar; la parte baja del ábside (no visible en la foto) está formada por sillares que responden a la primera etapa constructiva, en el centro vemos unas hiladas de sillares de etapa gótica, incluso con marcas de canteros, encima volvemos a encontrar lo que podríamos calificar de sillares originales y todo coronado por la clásica cornisa que marca el nivel superior del ábside y por encima vemos el sobre levantamiento. ¿Qué hacen estos sillares góticos en este lugar?

A grandes rasgos estas serían las dos primeras etapas del edificio.
La tercera etapa consistió en la construcción de una capilla con cripta sepulcral en el sector Norte, una capilla y una sacristía en el sector Sur, la elevación del ábside y la conversión de la espadaña en torre campanario. 
La capilla Norte está construida con buenos sillares, tiene una bóveda ojival definida por una sencilla imposta, un pequeño armario incrustado en el muro y el espacio sepulcral. A partir de aquí es la construcción más grosera que he visto nunca. Aunque la capilla es perpendicular a la nave, la bóveda se entrega de una manera muy forzada a la nave, en el lado Este eliminaron los montantes del arco presbiteral y del arco absidal, en el lado Oeste rompieron los sillares del montante del arco toral para encajar la bóveda. Debido a que el arco absidal tiene una luz inferior al arco toral, da la sensación que adaptaron la embocadura de la capilla al sesgo de estas luces y no supieron resolver la parte superior de la bóveda.
En la fotografía podemos apreciar como del lado izquierdo nace la bóveda a la altura de la imposta y va en diagonal a encontrar la escuadra del ábside en lugar de entregarse al arco presbiteral, también podemos ver la forma que adopta la parte superior de la bóveda.
En el lado Sur se encuentra una segunda capilla y una sacristía o habitáculo para el sacerdote. Estas construcciones a pesar de ser posteriores a la capilla de enfrente, evidencian un cambio en la economía de la iglesia, por un lado incorpora formas renacentistas como la bóveda de medio punto y por otro lado tenemos la inconsistencia del material empleado en su construcción que ya no tiene nada que ver con la buena calidad que hemos encontrado a la otra capilla; de aquí que toda esta parte ha colapsado en primer lugar.
Interior de la sacristía o habitáculo.
Es factible pensar que la conversión de la espadaña en torre campanario también es de ésta época por el tipo de material utilizado. Esta torre tiene dos pisos de altura y seguramente serviría de vivienda a algún mozo de vigilancia. Se puede acceder sin ninguna dificultad -de una simple zancada- subiendo a la cubierta de la capilla Norte y caminando por sobre la bóveda de la nave, incluso hay una pasarela para hacerlo más fácil.
Pasarela para acceder al interior de la torre. Recomiendo no ir por la precariedad del edificio.
Podemos observar perfectamente la torre nueva junto a la espadaña y los dos pisos. Los dinteles construidos con vigas de madera, también los encontramos en el paso que va de la capilla Sur a la sacristía.
Siempre me ha fascinado la osadía de los constructores medievales, de esta falta de miedo para sacar adelante un proyecto se han hecho eco grandes arquitectos mundiales como Sebastiano Serlio, Viollet le Duc o el mismo Antoni Gaudi. Aquí, en la iglesia del Remei, llevaron la audacia a niveles extremos. Quizá pensaréis: ¿A que viene ésta introducción si ya hemos visto el edificio?
Sección del edificio visto desde el lado Norte.
Sección del edificio visto desde el lado Sur.
Pues ahora observad muy bien cómo se aguanta la torre campanario en la sección Norte, las toneladas de piedra que hay encima los dos arcos torales o sencillamente encima de la cumbrera de la bóveda y no se ha derrumbado.
Pero hay que tener muy presente dos puntos:
  • Que el arco del lado de poniente -el que no tiene ningún tipo de pilar debajo- y la cumbrera de la misma bóveda están agrietados.
  • Que un arco toral está dimensionado sólo para aguantar el peso de una parte de la bóveda, no una bóveda y una torre campanario.
Personalmente no pienso entrar nunca más en ésta iglesia y alguien debería tomarse muy en serio el edificio ya que hay una casa de colonias al lado y los niños corren por aquellos lugares.
Si observamos la imagen superior izquierda, entenderemos el porqué del refuerzo aplicado al muro Norte.
Finalmente adornaron el edificio con una pequeña marquesina de madera que protegía la entrada; un coro en el fondo de la nave con una escalera en ángulo que aprovecharon para hacer un armario en su parte inferior y un camarín para la adoración de la virgen.

jueves, 16 de septiembre de 2021

San Miguel de Grialó


De Torreblanca a Colldelrat o Grialó (Artesa de Segre, comarca de la Noguera) habría pocas horas de viaje a caballo, es fácil pensar que una estructura arquitectónica se copiara de un edificio a otro.
“Enciclopedia Catalana” lo describe así (traducido del catalán): "... Se trata de un edificio en estado de ruina, pero que conserva perfectamente su estructura, que responde a un curioso edificio de dos naves, correspondientes a dos fases constructivas diferentes. La nave norte, que pertenece a la primera fase, es la que se conserva en mejor estado, mientras que la nave sur está prácticamente arruinada y presenta numerosos interrogantes sobre su estructura, si es que realmente se llegó a construir en su totalidad... "
La bóveda de cañón de esta iglesia estaba soportada por tres arcos formeros de perfil semicircular que definían unas pequeñas capillas teniendo un fondo plano que se corresponde con el muro de cierre. La parte superior de los arcos conecta directamente con la bóveda sin imposta que marque divisiones. Enfrente unos arcos torales hechos con bloques de piedra de gran tamaño puestos en sentido vertical, ayudaban a soportar el peso de la bóveda.
Arcos formeros y arranque de los arcos torales.

Esta estructura de nave y bóveda es convencional y no tiene nada de extraño, el problema lo tenemos en la entrega de la nave al presbiterio.
Para entenderlo mejor lo veremos por ambientes:
  • Ábside o espacio presbiteral, se corresponde con un ¼ de esfera, es la parte más baja del edificio y también es la más sólida.
  • Arco triunfal (técnicamente es un arco de reducción), suele ser de punto redondo, hace de marco al ábside o escenario litúrgico, es más alto y ancho.
  • Nave, aun es más alta y más ancha que el arco triunfal o de reducción, si la nave lleva arcos torales de apoyo, suelen tener la misma altura que el arco triunfal.
(Nota: normalmente los dos tipos de arcos se consideran sinónimos y se utilizan indistintamente)
Esta iglesia y San Juan Bautista de Torreblanca, comparten que delante del arco triunfal, hay un arco toral (innecesario arquitectónicamente hablando) situado a poco más de medio metro. En medio de los respectivos montantes o pilares que aguantan los arcos, en Grialó tenemos una hornacina, pero en Torreblanca abrieron un espacio suficientemente grande en la roca como para convertirlo en sacristía, de todos modos puedo asegurar que hay pocos cardenales en la curia romana que puedan hacer pasar su barriga por aquel espacio.
De izquierda a derecha podemos observar: nave, arco toral, nave, arco de reducción, arco absidal, escenario litúrgico.
En la parte inferior de la  fotografía y entre el arco toral y el triunfal se puede ver la hornacina y encima una ventana abocinada (difícil de apreciar por la potencia de la sombra del primer arco)
Esta fotografía corresponde a la iglesia de San Juan Bautista de Torreblanca y nos permite comparar las dos cabeceras, prescindiendo del arco toral de la izquierda, podemos observar: nave, arco toral, arco triunfal y escenario litúrgico. Aquí nos aparece realmente el arco triunfal típico del prerrománico pero que va desapareciendo en el románico y cómo podemos observar tiene unas dimensiones más pequeñas que el ábside a diferencia del arco de reducción que es más grande que el ábside.
Detalle de la ventana simétrica ubicada en el lado Sur. En el centro del ábside también hay una ventana de éstas características.
En la  fotografía podemos apreciar como tuvieron el humor de pintar las juntas de los sillares de un color rojo.
La puerta originalmente estaba situada dentro del arco formero central del lado Sur, aunque se desplazó más cerca del ábside cuando querían construir una segunda nave paralela a la nave vieja.
Puerta en el lugar original en la primera fase.
Dos vistas y sección Sur, podemos apreciar como los arcos tienen diferente luz y altura. Imágenes correspondientes a la primera fase.

Llegados a este punto nos queda determinar si llegó a tener dos naves, sabemos que el ábside se sobrealzó, se construyó parte de un muro a tocar la esquina Suroeste, se trasladó la puerta más cerca del ábside y se trabajó bien su parte exterior engrosándola.
Podemos apreciar el bisel del primer ábside y el sobre alzado, más a la izquierda vemos la nueva puerta y el engrosado aplicado que no continúa a lo largo de la nave; justo a la derecha de la puerta, en la parte superior se puede ver el arranque de lo que podría ser un arco toral.
En primer plano, la puerta original desmantelada y a la derecha la nueva puerta engrosada, la cornisa superior es ornamental; la diferencia con una imposta que nos permite aguantar una bóveda, es que la imposta es una pieza de piedra bastante profunda que nos permite apoyar en ella los sillares de la bóveda.
En primer término vemos los restos del supuesto muro Sur de la segunda nave, observamos que le han arrancado los sillares y ha quedado el núcleo del muro, al fondo se aprecia el muro Sur de la iglesia.
En el extremo izquierda podemos ver restos del nuevo muro de la segunda nave en contacto con la esquina Suroeste.
A partir de aquí se presentan varias opciones, naturalmente todas hipotéticas y contrastables:
  • Construir una segunda nave abriendo los tres arcos formeros para comunicarse, sin ábside y bóveda a sardinel, tendrían problemas con las cubiertas ya que no podemos pensar en una doble cubierta a dos aguas.
  • Construir una segunda nave abriendo los tres arcos formeros para comunicarse, sin ábside ni bóveda, con tejado de madera a simple agua.
  • Construir un porche o atrio y tantas soluciones como se puedan imaginar.
  • Además de todo esto hemos de tener presente que no hay montaña para construir ningún ábside o terminar la nave.
Si la solución hubiera sido construir una segunda bóveda con la perforación de los formeros y la construcción de unos torales, (dibujo superior) no habría que doblar todo el espesor del muro central, ya que las dos bóvedas neutralizarían sus respectivos esfuerzos. El hecho de que no haya obra construida en estos puntos, podría validar esta hipótesis. Ya hemos visto un arranque de lo que parece un arco toral a la derecha de la puerta como lo vemos dibujado.
No se ver qué sentido tiene trasladar la puerta si después queda encerrada en la nueva nave, a no ser que quisieran reproducir este modelo de puerta con cornisa a los tres formeros doblando todo el grueso de la nave y abrir una nueva puerta en el muro Oeste. No conozco ninguna iglesia románica que tenga un muro de casi dos metros de espesor contando los torales.
Análisis de la fotografía superior empezando por la izquierda:
  • La puerta en la nueva ubicación pensada para doblar el grosor de la nave, obsérvese el impresionante espesor que tiene al sumarle el grueso de la nave vieja.
  • Encima del arco vemos una cornisa y encima dos hiladas de sillares muy bien escuadrados. Puestos a complicarnos la vida, podríamos pensar que querían construir una bóveda peraltada y que las dos hiladas corresponden precisamente al peralte, el arco lo harían a continuación y que la cornisa que vemos, en realidad fuera imposta. Todo ello es ir muy lejos con la imaginación.
  • A continuación vemos el pilar o montante del arco toral con el inicio del arco propiamente dicho.
  • A su derecha vemos un módulo prismático, reconozco que no soy capaz de entender qué utilidad arquitectónica podía tener. En el centro vemos la ventana del lado Sur de la nave vieja que la tuvieron que alargar más de 30 cm. que es el grosor que tiene el módulo.
  • Finalmente vemos el ábside con la cornisa primitiva y el sobre levantamiento.
  • Obsérvese en la fotografía como la línea base del objetivo de la máquina está al nivel del suelo del edificio, si tenemos en cuenta que quien escribe hace metro ochenta de altura, nos daremos cuenta de la complicación que tenían para rellenar toda aquella parte de la montaña para construir un ábside o sencillamente construir la pared Sur de la nueva nave.
  • Quién comenzó la segunda fase seguramente tenía mucho dinero para gastar y un buen proyecto, las dimensiones y el trabajo de escuadrado de los sillares, denotan un estilo arquitectónico alejado del románico del siglo XI; posiblemente todo se vio truncado por un fuerte evento social, la muerte del párroco no lo habría paralizado todo, debía ser más grave, no me extrañaría que habláramos incluso de la famosa peste del siglo XIV.
Esta iglesia la he visitada muchas veces en busca de explicaciones y cada vez he acabado diciendo que no tenía ningún sentido publicar nada, al final lo he hecho para ver si entre todos podemos hacer algo para entenderla un poco mejor.